Parte de ser fiel a mí mismo es tomar tiempo para la introspección. Tal vez, con una caminata en el bosque, observando lo que vive alrededor de las rocas, examinando una flor para descubrir su fragancia y sus detalles o siguiendo el trino de un pájaro para ver dónde ha hecho su nido. Al estar atento y vivir conscientemente, fomento y cimiento la comprensión de que hacer cambios externamente no es la clave para una vida auténtica —he de ir a mi interior. Estoy dispuesto a continuar examinando lo que se encuentra debajo de todo: mi conciencia. El cambio que surge al mirar hacia dentro y reconsiderar pensamientos, creencias y hábitos me lleva continuamente hacia exploraciones y descubrimientos mayores y significativos.
Texto devocional: Pero el que practica la verdad viene a la luz, para que sea evidente que sus obras son hechas en Dios.—Juan 3:21
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